
Según el estudio ATLAS, impulsado por la Asociación Española de Andrología, Medicina Sexual y Reproductiva (ASESA), el 67% de los españoles afectados por disfunción eréctil acude al médico sin la compañía de su pareja por esta cuestión, lo que evidencia que se trata de un problema que, a menudo, el hombre intenta resolver en solitario y eso hace que la disfunción eréctil suponga, en muchas ocasiones, el inicio de grandes crisis de pareja.
Ya que un gran número de afectados tiende a recluirse ante la pérdida de la erección, no sin antes, producirle sorpresa y por lo tanto se exponen a las relaciones sexuales con la intención de ver qué sucede. Una vez que constatan que estos episodios se repiten:
- sienten vergüenza,
- evitan las relaciones sexuales,
- se vuelven reservados y
- suelen perder la autoestima y deprimirse.
La pareja, clave en la búsqueda de soluciones
La pareja del varón que padece disfunción eréctil también resulta afectada, tanto en su relación con él como en el ámbito sexual y por ello es, al mismo tiempo, la mejor aliada para buscar soluciones.
Cuando se manifiesta la disfunción eréctil en el hombre, las relaciones sexuales a menudo se suelen dejar de lado. La impotencia o disfunción eréctil, a diferencia de lo que pasa en otros trastornos como la eyaculación precoz, que produce una gran ansiedad ante el acto sexual y que puede desembocar en la ruptura de la pareja (jóvenes), se manifiesta a edades más tardías y el impacto en la relación no es tan radical.
- NOTA IMPORTANTE – En muchos casos, los varones, al no tener erecciones, no toman la iniciativa en las relaciones sexuales y, por lo tanto, no sucede nada.
A esto se suma que el hombre esconde esta alteración por vergüenza y tiende a guardarlo en secreto y no comentarlo con nadie, ni siquiera con su pareja, y la mayor parte de las veces, si al final decide consultar a un especialista, va solo.
En otras ocasiones, la mujer se percata del problema y es quien le anima y le da el empujón para que acuda al médico.
La disfunción eréctil, un síntoma de alarma de otras posibles enfermedades
El problema de la disfunción eréctil puede tener su origen en factores de riesgo vascular que pueden producir lesiones progresivas en todas las arterias del cuerpo; como:
- Hipertensión
- Diabetes
- Tabaquismo
- Aumento del colesterol
DATO – Las arterias del pene tienen menos diámetro que las arterias coronarias que irrigan al corazón y muchas veces se obstruyen inicialmente. Además, múltiples estudios han demostrado que los pacientes con riesgo vascular pueden desarrollar inicialmente una disfunción eréctil.
Si estos factores de riesgo no se corrigen, la enfermedad vascular avanza y puede producirse un infarto de miocardio, enfermedades vasculares en el cerebro, en el corazón y en todas las arterias del organismo.
Por ello, en este sentido, es muy importante saber que la disfunción eréctil puede ser una señal de alarma que nos avisa que las arterias se están cerrando. Cuando un paciente, con factores de riesgo cardiovascular presenta disfunción eréctil debe consultar a un especialista lo antes posible para prevenir otras posibles enfermedades asociadas.
Tratamiento de ondas de choque para la disfunción eréctil
El Tratamiento de Ondas de Choque para la Impotencia supone un gran avance ya que es el primero que ataca la raíz del problema:
- la falta de aporte de sangre al pene por arteriosclerosis (estrechamiento de las arterias).
A diferencia de otros tratamientos sintomáticos como la medicación, cremas, inyecciones o dispositivos de vacío, que solo actúan mientras se aplican, el efecto de las ondas de choque es duradero una vez completadas todas las sesiones. Las ondas de choque de baja intensidad mejoran significativamente la:
- función eréctil,
- dureza de la erección del pene y
- satisfacción del paciente.
En Venegas Salud contamos con un equipo de ondas de choque de última generación con el que hemos obtenido muy buenos resultados con un índice de satisfacción muy alto por parte de los pacientes. ¿Quieres más información? Llámanos y pide cita.